EÓLICA
La eólica terrestre ha sido la tecnología más utilizada desde la aparición de los primeros grandes aerogeneradores, por la época de los 90, debido a que su instalación y puesta en marcha son más fáciles y los costes de operación y mantenimiento menores. Sin embargo, el impacto ambiental, la limitada superficie disponible y la menor capacidad de generación energética han hecho que vaya perdiendo crecimiento a medida que su hermana lo gane.
La eólica marina representa el futuro de la tecnología, ya que en el mar el flujo de viento es más constante y fuerte, por lo que la generación es mayor. Además, el impacto visual es menor con lo que el tamaño de los aerogeneradores puede crecer gracias a la superficie casi ilimitada. No obstante, los costes de operación, instalación y mantenimiento siguen siendo elevados, y precisamente esos factores son los objetivos de mejora de la tecnología a corto y medio plazo.
